La clorofila y su importancia para la salud
La clorofila (savia vegetal), también conocida como sangre verde de las plantas, es una de las joyas de la naturaleza, con múltiples beneficios para la salud física y mental del individuo humano, utilizándose en programas de adelgazamiento y tonificación, pero también en el tratamiento de problemas hormonales y respiratorios e incluso en la prevención del cáncer.
¿Qué es la clorofila?
La clorofila es el pigmento verde que se encuentra en muchas plantas (desempeña un papel fundamental en la fotosíntesis, por lo que también se le llama la sangre verde de las plantas) y organismos, descubierto en 1817 por los científicos franceses Joseph Bienaimé Caventou y Pierre Joseph Pelletier. La clorofila se utiliza con fines terapéuticos y medicinales desde el siglo XIX, gracias a sus numerosos efectos beneficiosos para el ser humano, ya que es extremadamente rica en nutrientes esenciales para el desarrollo armonioso del cuerpo humano (vitaminas A, B, C, D, E, K, calcio, magnesio, hierro, potasio, calcio, magnesio, hierro, potasio). En las dosis adecuadas y a partir de una fuente segura y de alta calidad, la clorofila mejora las funciones y la salud del organismo.
¿Dónde podemos conseguirla?
La clorofila se encuentra en la mayoría de los vegetales a los que tenemos acceso en la vida cotidiana(espinacas, lechuga, brócoli, col, col rizada, rúcula, espárragos, apio), en bebidas (té verde), pero también en complementos asociados: cápsulas (blandas, vegetales, gelatinosas), comprimidos masticables, polvo (chlorella, espirulina, hierba de trigo) o clorofila líquida. En el caso de los suplementos, se deja al criterio y las recomendaciones del fabricante la forma de consumirlos (teniendo en cuenta factores como la edad, el peso, el sexo, etc.) - por ejemplo, la dosis diaria recomendada de clorofila pura extraída de las hojas de alfalfa y trébol en forma de comprimidos masticables es de 1-2 comprimidos al día (sólo para adultos), mientras que la dosis diaria recomendada de clorofila líquida es de 20 ml (para adultos) y 10 ml (para menores de 16 años), con la advertencia de que el producto no está recomendado para recién nacidos.
¿Cómo puede consumirse?
La clorofila puede consumirse en ensaladas verdes (ensalada de espinacas, ensalada de tomate y rúcula, ensalada de espárragos, ensalada de apio y zanahoria), en bebidas (té verde), en guarniciones (espinacas hervidas, espinacas soté, brécol hervido, brécol soté), sopas cremosas (espárragos, apio), purés (espinacas, brécol) e incluso frescos y batidos(diversas combinaciones de espinacas, brécol, apio, limón, etc.).a), la elección entre la variedad presentada se deja a la creatividad, el gusto y el deseo del consumidor.
Los beneficios de la clorofila:
En la dieta diaria, la clorofila ofrece numerosos beneficios para la salud:
Aumenta el recuento de glóbulos rojos
La clorofila facilita la limpieza de la sangre y mejora el transporte de oxígeno a través de la sangre (es decir, la oxigenación cerebral), potenciando la energía, las capacidades intelectuales y contribuyendo al bienestar general del organismo.
Previene e inhibe el desarrollo del cáncer
Según varios estudios estadounidenses, la clorofila puede prevenir el cáncer (especialmente el de colon) combatiendo varios carcinógenos presentes en el aire y en los alimentos (incluida la protección contra los compuestos nocivos que dañan el ADN presentes en los alimentos fritos).<.p>
Tiene propiedades antioxidantes
La clorofila neutraliza las moléculas nocivas del organismo y previene el desarrollo de enfermedades derivadas del estrés oxidativo causado por los radicales libres.
Ayuda contra la anemia
La clorofila, gracias a sus propiedades que mejoran el transporte de oxígeno por la sangre y a su riqueza nutricional (incluido el hierro), previene y combate la anemia, una enfermedad cada vez más frecuente hoy en día caracterizada por la falta de oxígeno y hierro en la sangre.
Posee propiedades antimicrobianas, antialérgicas y antisépticas
La clorofila inhibe el crecimiento de microbios en el organismo, ayuda a tratar el asma y la rinitis alérgica, y también puede utilizarse de forma tópica sobre la piel para desinfectar y regenerar heridas y hongos (por ejemplo, cándida) más rápidamente.
Desintoxica el organismo
La clorofila tiene propiedades depurativas que ayudan a tonificar los órganos internos y a eliminar las sustancias tóxicas del cuerpo - sus propiedades diuréticas también facilitan la micción, en sí un proceso natural de eliminación de toxinas del propio cuerpo.
Refresca el olor corporal
La clorofila es un odorante natural que elimina los olores corporales desagradables, ya sean procedentes del sudor o de alimentos ingeridos como el ajo y la cebolla, conocidos por causar halitosis (mal aliento).
Mejora la digestión
La clorofila mejora las funciones del estómago, el colon, el hígado y la vejiga, aliviando los trastornos del tubo digestivo, y también combate el mal olor resultante de la ingestión de diversos alimentos (ajo, cebolla, lejía, etc.) y las flatulencias (gases intestinales).
Ayuda a perder peso
La clorofila, gracias a la cantidad de fibra presente en los alimentos que la contienen, reduce la sensación de hambre, proporcionando una saciedad duradera y reduciendo la retención de líquidos en el organismo, lo que facilita la eliminación de los kilos de más y los programas de adelgazamiento.
Refuerza la inmunidad
La clorofila, debido a su naturaleza alcalina, refuerza el sistema inmunitario del organismo, creando un entorno hostil para las bacterias anaerobias (las culpables de la propagación y el desarrollo de enfermedades en el cuerpo), al tiempo que acelera los procesos de curación y recuperación.
Fortalece los huesos
La clorofila, rica en magnesio y calcio, ayuda a construir y mantener unos huesos fuertes y a relajar y fortalecer los músculos. La clorofila es también un aliado beneficioso en el tratamiento de afecciones reumáticas y artritis.
Equilibra las hormonas
La clorofila equilibra la producción de hormonas (testosterona en los hombres y estrógenos en las mujeres).
Ayuda al sistema nervioso
Debido a sus cualidades antiinflamatorias, la clorofila tiene efectos calmantes sobre el sistema nervioso, previniendo el insomnio, los episodios de irritabilidad nerviosa e incluso la depresión. También puede ayudar en periodos de estrés y de intensa actividad física e intelectual.
Retrasa el envejecimiento
La clorofila estimula las enzimas, favorece la mejora de los tejidos cutáneos y combate su degradación, previniendo el envejecimiento físico y mental del organismo.
Riesgos
Tras el consumo de clorofila (en forma de suplemento o en su versión hidrosoluble, la clorofilina) existe la posibilidad de experimentar síntomas de carácter molesto (calambres estomacales, heces decoloradas, diarrea). No obstante, la incidencia de efectos secundarios adversos para el cuerpo humano es rara, siempre que se compruebe la calidad, validez y cantidad de los productos consumidos; también está contraindicado que las mujeres embarazadas tomen clorofila por motivos de seguridad y precaución.
Conclusión
La clorofila se recomienda, por tanto, a todas las personas interesadas en la idea de una vida caracterizada por la salud (ya sea física o mental) y la longevidad, y es útil para los jóvenes y adolescentes en edad de crecimiento, así como para quienes realizan actividades físicas e intelectuales estresantes (trabajadores, deportistas, alumnos, estudiantes, profesores, ingenieros, etc.).